Por Marcelo Castaños / La Capital
Alvear: Un principio de incendio alteró la tranquila madrugada de ayer en esta localidad, donde desconocidos rociaron con nafta el frente de la casa del presidente comunal, Carlos Pighin, y le prendieron fuego. Adentro de la vivienda dormía la madre del mandatario, que salvó su vida por milagro gracias a una vecina que, alertada por las llamas, la llamó por teléfono y le avisó lo que ocurría, y esto permitió que pudiera salir en medio de una intensa humareda que ya había invadido buena parte de la propiedad.
El hecho ocurrió pasadas las 2 de la mañana, cuando Pighin disfrutaba en Mar del Plata de su último día de vacaciones, su madre Nilda había quedado al cuidado de la vivienda de Roma y San Martín, y la secretaria de Gobierno, Angela Rossi, al frente de la comuna.
En ese momento, Adela Alvarez, una vecina que vive en la otra esquina (por Roma) advirtió el fuego en la casa del farmacéutico que hoy dirige los destinos de Alvear, lindera al negocio. "Iba a cerrar la ventana porque nos íbamos a dormir y me encontré con una llamarada inmensa", contó a LaCapital la vecina, mientras pedía insistentemente que no la fotografiaran (ver aparte). "Mi hijo mayor me dijo: «Llamá a la cana», y lo hice. Pero primero la llamé a Nilda. Ella creyó que se estaba incendiando un árbol, pero le dije: «No, es la casa, salga enseguida».
Ayudada por vecinos, la madre del mandatario, de 70 años, consiguió sofocar el fuego con agua y salir de la vivienda. Algunas versiones decían que había sufrido un principio de asficcia, pero esto fue desmentido por el jefe de la subcomisaría 8ª, Roberto Sandoval.
El policía reveló que muy cerca del lugar, los efectivos de la seccional hallaron un bidón con fuerte olor a nafta. "Estuvimos investigando en algunos surtidores de la zona si tenían registro de la venta de ese bidón y si podían identificar con las cámaras de seguridad a los compradores", reveló, aunque aclaró que la búsqueda no arrojó resultados positivos. "No todas las estaciones tienen cámaras", dijo. No obstante, aseguró que "se está chequeando enre los vecinos para determinar si vieron a alguien corriendo o merodeando el lugar con algún vehículo". De lo que sí está seguro es de que si Nilda Pighín no era alertada por su vecina, podría haber muerto asficciada.
“No durmió la pobre”
La Capital intentó infructuosamente hablar con la madre del mandatario. Ayer por la tarde, la pacífica esquina de San Martín y Roca estaba prácticamente desierta, alterada sólo por el cuchicheo de cuatro adolescentes que pasaban el rato sentadas frente a la casa de los Pighin y que se fueron cuando vieron al periodista y al fotógrafo de este diario.
Nadie atendió a los repetidos golpes en la puerta y el portón chamuscados. “Debe estar descansando, pobrecita, no pudo dormir en toda la noche”, especuló su vecina mientras charlaba con el cronista de La Capital. “Cerrado por vacaciones”, se leía en un cartel en la persiana de la farmacia.
Un dato: Tao, el perro de la casa, no ladró en ningún momento; al parecer, ni registró el siniestro.
El que no paraba de ladrar ayer era Tilo, una de las mascotas de Adela, un cuzquito que le debe el nombre a su eterna pachorra pero que ayer estaba visiblemente alterado. Demasiada movida para su rutina de siesta permanente, bajo un sol sofocante que recalentaba el canto rodado conque mejoraron calle Roma.
Retorno adelantado
Mientras La Capital recorría el barrio, Pighin viajaba desde Mar del Plata, alertado por lo sucedido, y se esperaba que al cierre de esta edición llegara a su pueblo.
En un breve diálogo telefónico, contó que había salido de vacaciones por una semana y que tenía pensado volver hoy. El regreso se le adelantó un día. “Fue un susto muy grande, mi mamá estaba en la casa”, dijo escuetamente, y se excusó: “Quiero llegar y ver bien qué pasó, estas son cosas muy delicadas”.
Ninguna de las fuentes consultadas quiso arriesgar teoría alguna ni especular sobre algún móvil en particular. “Esto está en plena investigación, no manejamos ninguna hipótesis, estamos esperando el resultado del accionar policial y que vuelva el jefe comunal”, dijo la secretaria de Gobierno.
No es la primera vez que se produce un episodio de este tipo en Alvear. Hace un año, el ex presidente comunal, Montagni, también sufrió un intento de incendio en su vivienda, en un caso que parece ser el sino de los mandatarios locales.
Nota del Diario La Capital del 15-01-11
